El café (coffea)
de Colombia es una Indicación Geográfica Protegida, la cual fue reconocida en
forma oficial por la Unión Europea el 27 de septiembre de 2007. Dicha
denominación se le otorga al café 100% arábigo (coffea arabica)
producido en las regiones cafeteras de Colombia, delimitadas entre la latitud
Norte 1° a 11°15, longitud Oeste 72° a 78° y rangos específicos de altitud que
pueden superar los 2.000
metros sobre el nivel del mar. El término café de
Colombia también es una marca de certificación registrada en Estados Unidos
el 7 de julio de 1981, y en Canadá el 6 de julio de 1990. Así mismo, está
reconocido como Denominación de Origen Protegida en otros países del mundo,
como Ecuador, Bolivia y Perú.
A nivel mundial,
Colombia es el tercer país productor de café y el mayor productor de café suave
en el mundo. Los principales países importadores del café de Colombia son Estados
Unidos, Alemania, Japón, Países Bajos y Suecia.
Existen varias
versiones relacionadas con la llegada del café a Colombia. Algunos indicios
históricos señalan que los Jesuitas trajeron el grano a la Nueva Granada hacia
1730. Por otro lado dicen que este producto arribó gracias a un viajero que
venía de las Guayanas a través de Venezuela.
El más antiguo
testimonio escrito acerca del cafeto en Colombia se le atribuye al sacerdote
jesuita José Gumilla, quién en su libro El Orinoco Ilustrado (1730) registró la
presencia del producto en la misión de Santa Teresa de Tabajé, llevada a cabo
en cercanías a la desembocadura del río Meta en la Orinoquía.
El segundo
testimonio escrito fue elaborado por el arzobispo-virrey Caballero y Góngora
(1787), quién en su informe a las autoridades españolas registró su cultivo en
regiones cercanas a Girón (Santader) y Muzo (Boyacá).
Desde 1835 se
comenzó a cultivar comercialmente el grano de café en Colombia en Salazar de
las Palmas, Norte de Santander. Gran parte del incentivo a la producción se le
atribuye a Francisco Romero, sacerdote de la época que imponía a los feligreses
de la población, durante la confesión, la penitencia de sembrar café. Esto fue
un gran impulso para la propagación del cultivo del grano en esa zona del país.
Con estas semillas se logró una posterior expansión y presencia del cultivo en
departamentos como Santander, Norte de Santander, Cundinamarca, Antioquia, el
Centro del país y posteriormente en el sur.
Durante el siglo
XX fue el producto primordial dentro de las actividades comerciales
colombianas, registrando exportaciones de hasta 2.560 sacos. En 1999 representó
un 3,7% del producto interno bruto nacional y un 37% del empleo agrícola. Los
principales departamentos productores de café son: Nariño, Norte de Santander, Antioquia,
Valle del Cauca, y Cundinamarca, Huila, Tolima, Caldas, Risaralda, Quindío,
conociendo los tres últimos como el Eje Cafetero.
La consolidación
del café como producto de exportación en Colombia sólo se dio a partir de la
segunda mitad del siglo XIX. La expansión que tuvo la economía mundial en ese
período hizo que los hacendados colombianos del oriente del país encontraran
oportunidades atractivas en el mercado internacional. Pasado el tiempo, Norteamérica
iba consolidándose como el consumidor más importante de café en el mundo. Así
mismo, Alemania y Francia se convertían en los mercados más interesantes de Europa.
Años más tarde,
en la transición del siglo XIX al XX, se registró una caída de los precios en
el mercado internacional repercutiendo en la rentabilidad y economía de las
grandes haciendas. Sumado a esto, el desencadenamiento de la Guerra de los Mil
Días, imposibilitó una adecuada manutención de las plantaciones; hecho que
termina por arruinar los cultivos dejando endeudados en el exterior a los
hacendados del país, quienes entraron en crisis con sus fincas en los
diferentes departamentos cafeteros de aquel entonces.
Esta crisis de
las grandes haciendas produjo uno de los cambios más significativos en la
caficultura colombiana. Desde 1875 se había comenzado a ampliar el número de
pequeños cafeteros en Santander, Antioquia y en la zona del denominado Viejo
Caldas. En la primera década del siglo XX se había logrado consolidar un
novedoso modelo de desarrollo exportador cafetero impulsado por la colonización
de nuevas tierras, principalmente, en los departamentos de Antioquia, Caldas,
Valle del Cauca y Tolima. Esto, además de la crisis de las grandes haciendas, hizo
que a principios del siglo XX el centro-occidente colombiano tomara la
delantera con respecto al desarrollo cafetero del país.
Esto resultó
favorable para los propietarios de pequeñas parcelas que apenas incursionaban
en el sector. El cultivo del café se convirtió en una opción muy atractiva para
los campesinos, en la medida que ofrecía la posibilidad de hacer uso permanente
e intensivo de la tierra, puesto que permitía alternar los cafetos con otros
cultivos de pan coger, básicos para la subsistencia. Se forjó entonces una
economía campesina de pequeños propietarios rurales que optimizan su mano de
obra familiar y que aún hoy subsisten. En el período comprendido entre 1905 y
1935 la industria del café en Colombia creció de una forma dinámica. La creación
de la Federación Nacional de Cafeteros en 1927 permitió a los productores
establecer un mecanismo de diálogo con el gobierno y el impulso de políticas
para el desarrollo del sector. La unión de campesinos y pequeños productores en
torno a la Federación les permitió afrontar retos comunes de logística y
comercialización desde ese entonces.
Con el tiempo, y
a través del Centro Nacional de Investigaciones de Café - Cenicafé fundado en
1938, y del Servicio de Extensión Rural de los Comités Departamentales de
Cafeteros se han desarrollado sistemas de cultivo y de trazabilidad permitiendo
diferenciar el producto y garantizar su calidad. Actualmente el Café de
Colombia se produce en todas las cordilleras y zonas montañosas del país,
generando ingresos a más de 500.000 familias productoras del grano.
En 2005 el
gobierno de Colombia reconoció el estatus de Denominación de Origen al
producto. En Junio del mismo año se presentó la solicitud de Indicación
Geográfica Protegida ante la Unión Europea para el Café de Colombia. Dicho
reconocimiento fue otorgado en septiembre de 2007.
No hay comentarios:
Publicar un comentario